Al habla Helena de nuevo, que no para:

Al final me he decidido por una hopa medieval. La hopalanda u hopa, una nueva prenda para los españoles del siglo XIV; consistía en una prenda de cuerpo completo destinada a cubrir la saya. Similar a una bata cerrada (que en las mujeres podía tener un escote picudo y dos o un corte en la falda para facilitar el paso) era de amplios pliegues y mangas largas que podían llegar a arrastrarse.

Como no tenemos tiempo suficiente, nos limitaremos a hacer la hopalanda mientras que la saya, que no se verá en nuestros vídeos) será sustituida por un vestido.

La hopa que hemos empezado a hacer es ajustada en el vientre aunque, en realidad, debería ser amplia para apretarse bajo el pecho con un cinturón, pero podemos ahorrarnos ese efecto diseñando un traje más ajustado. Al mismo tiempo y aprovechando que tenía un paño de algodón y viscosa mucho más elástico que la lana, he hecho con este material el diseño principal de la hopa pero, en las próximas entradas, os añadiremos las mangas largas con varias capas, el tinte, los estampados y los bordados y demás decoraciones.

Aquí tenéis los primeros pasos de la hopalanda y advierto de que soy una sastra penosa:

Tras tomar las medidas de altura y anchura principales, he recurrido a un apaño muy útil: copiar la silueta de una camiseta.

Comprobando que las medidas se ajustan a mis necesidades, he copiado con jabón de sastre la silueta a la tela. También me aseguré que este esbozo se adaptaba a mi cuerpo ya que no tengo más modelos ni maniquíes con los que cerciorarme.

Como podéis ver, me he preocupado principalmente de la silueta de pecho y vientre, mientras que los hombros y la falda las he dejado para retocarlas con alfileres para más tarde.

¡A hilvanar!

Tras retocar los fallos de los hombros y asegurarlos con imperdibles (aprendí que los hilvanes que yo hago no aguantan ni una corriente de aire) terminé el escote con un sencillo corte porque sé que los errores los puedo cubrir un retoques, bordados, etc... Os subiría un selfie medieval, pero me puede la vergüenza, cuando vayamos avanzando ya veréis lo bien que queda.